La luxación de rótula consiste en la salida del hueso de la rótula de su posición anatómica normal, que es el la tróclea o surco femoral.
En condiciones normales la rótula se sitúa fuera del surco cuando tenemos la rodilla totalmente extendida y a partir de los 20º-40º de flexión se introduce en un surco situado en el fémur llamado tróclea. Ha este recorrido que realiza el hueso de la rótula le llamamos tracking rotuliano.
Una alteración del tracking rotuliano puede ocasionar dolor anterior de rodilla, conocido como síndrome femoropatelar o condromalacia rotuliana.

En la luxación de rótula, el hueso de la rótula abandona completamente su situación anatómica provocando un dolor intenso en la rodilla y deformidad al encontrarse la rótula fuera de su sitio.
Llamamos luxación de rótula aguda al momento en el que la rótula abandona su situa de forma súbita, luxación de rótula recidivante cuando lo hace con facilidad y frecuencia y luxación de rótula crónica o inveterada cuando la rótula permanece fuera de su sitio de forma constante.
Ante un episodio de luxación de rótula aguda lo primero que se debe de hacer es colocar la rótula en su lugar, para ello suele ser suficiente con estirar la rodilla del paciente y presionar la rótula desde la parte externa de la rodilla hacia la parte interna.
El primer episodio de luxación aguda puede deberse a traumatismo directo o indirecto, y la salida brusca y traumática del hueso de su sitio puede provocar lesiones en el cartílago y en la mayor parte de los casos la rotura del ligamento patelofemoral medial.
¿Por que se luxa la rotula?
La luxación de rótula se produce por un traumatismo directo o indirecto sobre una rodilla con unos factores predisponentes. Dicho de otra forma, la rodilla tiene unos mecanismos para estabilizar la rótula y evitar que se salga de su sitio, si alguno de estos factores está ausente, alterado o falla, hay más posibilidad de luxar la rótula que en un paciente con todos lo mecanismos de estabilidad intactos.
Factores predisponentes:
- Rotura del Ligamento patelofemoral medial, es un ligamento que mantiene la rótula en su sitio con la rodilla extendida hasta los 30º-40º de flexión. Es el responsable de sujetar aproximadamente el 50-60% las fuerzas de laterales y se rompe en más de un 90% de los casos de luxación aguda.
- Displasia troclear, existen varios tipos de formas del surco troclear. Surcos más profundos sujetan estabilizan más la rótula, surcos más planos son más inestables.
- Distancia TT-TG, distancia entre la inserción de la tuberosidad tibial (TT) y el surco troclear (TG). Distancias elevadas se traducen en un vector de fuerza externo excesivo que ayuda a la luxación de rótula.
- Patela alta, una rótula en posición elevada, necesita más grados de flexión para introducirse en el fémur y tiene más posibilidades de luxarse.
- Otros factores como: Anteversión femoral, genu valgo, torsión tibial externa, recurvatum
¿En qué consiste la cirugía de la luxación de rotula?
Existen múltiples técnicas quirúrgicas para la luxación de rótula, todas ellas encaminadas a proteger o solucionar los factores nombrados anteriormente.
De tal forma que se puede decir que la cirugía de la luxación de rótula es una ¨cirugía a la carta¨ en función de los factores que estén alterados.
La reconstrucción del ligamento patelofemoral medial es un procedimiento habitual que consiste en reconstruir dicho ligamento para favorecer la luxación de rótula.
Para la reconstrucción del ligamento patelofemoral se suele usar un recto interno del propio paciente o de banco de tejidos, se localizan los puntos anatómicos en la rótula y en el fémur adecuados, y se fija el ligamento en la posición y tensión correcta.
Plicatura de vasto interno, consiste en el refuerzo de las estructuras mediales de la rótula para aumentar su tensión y fuerza, de tal forma que se evite la luxación de rótula. A día de hoy no se suele realizar como procedimiento aislado y se añade a la reconstrucción del ligamento patelofemoral.
Osteotomía de la tuberosidad tibial, consiste en corregir la posición de la tuberosidad tibial (TT) y así disminuir la distancia TT-TG. La TT es lugar dónde se inserta el tendón rotuliano, el cual va desde el borde inferior de la rótula hasta la TT. En pacientes con distancias TT-TG elevadas la TT está demasiado lateral y hay que desplazarla hacia medial, en caso de patela alta se puede desplazar hacia distal para bajar la rótula.
En casos de genu valgo marcados o ante versiones femorales excesivas se pueden realizar osteotomías, es decir cortar el hueso y ponerlo en posición adecuada para corregir dichas deformidades. Aunque estos procedimientos no se realizan de forma habitual la cirugía de la luxación de rótula.
¿Cómo es el postoperatorio de la cirugía de la luxación de rótula?
El postoperatorio depende de los gestos quirúrgicos realizandos.
En casos de reconstrucción del ligamento patelofemoral aislada el paciente suele usar muletas durante 4-6 semanas. Durante las primeras 3 semanas puede realizar carga parcial, apoyando aproximadamente el 50% del peso de su cuerpo y doblar la rodilla hasta 60º. A partir de la 2º-3º semana puede aumentar la carga y los grados de flexión de forma progresiva. El deporte se autoriza de forma progresiva a partir de los 3 meses.
En casos de osteotomías el postoperatorio debe ser más cauteloso, debido a que hemos realizado unos cortes en el hueso que deben consolidar, de tal forma que el cirujano te indicará los pasos a seguir. De forma generalizada, se suele caminar sin carga durante 4 semanas para aumentar de forma progresiva la carga, se suele usar un inmovilizador de rodilla durante 2-3 semanas para tener la rodilla estirada y en algún casos ayudar a la flexión de forma controlada. El deporte no se suele autorizar hasta los 6 meses.
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